Al Macarena le faltó banquillo

La profundidad del banquillo del Alcobendas resultó fundamental para decantar el trepidante partido disputado ayer entre el Macarena y los madrileños. Y es que, con la ausencia del sancionado Luismi y el mermado estado físico del tocado Víctor, el Macarena afrontó la segunda parte con mucha menos gasolina que los capitalinos, que resolvieron el choque en el último cuarto de hora.

Hasta entonces, el encuentro había estado igualado, con dos escuadras jugando de tú a tú. No en vano, a la media hora el electrónico reflejaba un empate, roto en el 35, pero que pudo volver minutos después con varias ocasiones de los pupilos de Rodrigo Quintanilla. Cuando los locales buscaban a la desesperada el empate ante uno de los máximos aspirantes a subir a Primera Nacional, Eduardo puso la sentencia en el último suspiro.

 

Patín Macarena, 2: Rodrigo; Romasanta, Rafa, Javi y Pablo –cinco de salida- Víctor.  

 

Alcobendas, 4: Carlos; Marcos, Eduardo, Mario y Federico –quinteto inicial- Alvaro, Víctor Jiménez, Cascante y Zatta.

 

Goles: 0-1, m. 12: Federico; 1-1, m. 14: Romasanta; 1-2, m. 20: Federico; 2-2, m. 29: Romasanta; 2-3, m. 35: Álvaro; 2-4, m. 49: Eduardo.

 

Árbitro: Marcelino Benítez, sevillano.

 

Incidencias: Unas 100 personas.